Es conveniente usar el corrector ortográfico, pero tenemos que en cuenta que siempre es necesarias nuestra supervisión porque éstos no diferencian palabras que suenan igual ni palabras con distinta ortografía según su función.Aquí veis unos ejemplos, si no lo hubiese supervisado el corrector los habría dejado mal escritos:
Ojalá haya una cafetería cerca, ¿ Te tomarás un té si la encontramos ?
Es muy basto no tiene educación. Mi terreno es muy vasto, tiene veinte hectáreas.
¡Ay!, cuánta estupidez hay en el mundo.
viernes, 15 de enero de 2010
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